09 noviembre 2025

Los mosqueteros, Alatriste y el capitán Garfio


Paula Torres Gorozarri - zendalibros.com - 09/11/2025

El martes pasado, en la bodega de Protos en Peñafiel, entre vinos y libros de aventuras, la editorial Zenda-Edhasa celebró la puesta de largo de la nueva edición de 'Los tres mosqueteros', su último lanzamiento, prologado por Arturo Pérez-Reverte e ilustrado por Augusto Ferrer-Dalmau. Más de un centenar de personas, entre libreros, periodistas, profesores y cerca de cincuenta alumnos del instituto Conde Lucanor de Valladolid, se congregaron para atender al diálogo cómplice entre el propio Pérez-Reverte y la escritora y co-editora del sello, María José Solano.

Tras las palabras de Daniel Fernández, director de Edhasa, Pérez-Reverte —al más puro estilo de R. L. Stevenson—, recordó que «lo leí con ocho o nueve años. Entonces descubrí que la literatura es proyectarte sobre algo y que yo me sentía parte de eso. Toda mi vida he intentado cumplir con lo que ese libro me dejó: la aventura, los viajes, la lealtad, los amigos, los enemigos, las mujeres buenas y las mujeres peligrosas. Me marcó no solo como lector sino como persona». Continuó contando cómo «el personaje de Alatriste nace de los mosqueteros. Quise hacer una historia de un equivalente español». Un equivalente que difiere de ellos en su profesionalidad, en su escepticismo, y en ese remordimiento silencioso que encuentra su eco, paradójicamente, en el más noble de los mosqueteros: Athos. De esa dignidad en el remordimiento de Athos nace Alatriste.

En el prólogo de la nueva edición, el autor se permite “la chulería” de hacer coincidir en el tiempo y la ficción a Alejandro Dumas y al capitán Diego Alatriste, y se lo agradecemos. Un encuentro entre dos amigos, un guiño a lo leído y vivido, que regresa cuando Alatriste vuelve a las librerías con la promesa de una nueva aventura, 'Misión en París', treinta años después de su primera aparición.

Poco a poco, Solano y Reverte fueron desgranando el catálogo de la colección de grandes clásicos universales de Zenda-Edhasa. Comenzaron con 'Las cuatro plumas', de A. E. W. Mason, ambientado en el Sudán británico, que instauró la costumbre de regalar una pluma blanca en señal de cobardía. 'El enigma de las arenas', de Robert Erskine Childers, calificada en su momento por el periódico 'The Times' como “la primera y mejor novela de espías”. A la épica de 'Taras Bulba', de Nikolái Gógol, le sigue la aventura en estado puro con 'La isla de Coral', de R. M. Ballantyne, sobre la supervivencia y la amistad tras el naufragio del Arrow en el Pacífico.

Puntualiza Solano que las aventuras de 'Simbad el Marino' no forma parte de la serie de 'Las mil y una noches', y continúan con 'El jorobado de Notre Dame', de Víctor Hugo, maravilloso drama romántico, que animó a las autoridades del momento a restaurar la catedral de Notre Dame, verdadera protagonista de la obra.

Luego está Conrad y su 'Juventud', sobre la lucha entre el bien y el mal. Pérez-Reverte habla de novelas, de personajes buenos y sobre todo malos, de aventuras, del mar. Gracias a Conrad aprendió a identificar a las ratas, que son las primeras que huyen cuando se hunde el barco. Con 'Fantômas', de Allain y Souvestre, el villano se convirtió en el héroe adorado por todos. Al llegar a 'Peter Pan', de J. M. Barrie, Pérez-Reverte se detuvo para hablar con admiración y cariño de uno de sus personajes favoritos y desde luego el mejor malo de las novelas de aventuras: el capitán Garfio.

Tras 'Los cañones de Navarone', de MacLean, sobre una misión imposible en plena Segunda Guerra Mundial, volvemos a los espías clásicos con 'La máscara de Dimitrios', de Ambler. Los más recientes son 'La flecha negra', de Stevenson, acción trepidante en el comienzo de la Guerra de las dos Rosas, y 'Scaramouche', de R. Sabatini, sobre venganza e intriga política en el marco de los inicios de la revolución francesa.

Fue al final de la mañana cuando el maestro se dirigió directamente a los más jóvenes: «Antes de irnos quiero deciros algo: leed aventuras, libros de Historia, lo que sea, leer te prepara; las cosas que te ocurren ya las has visto, las has leído, las has jugado antes. Leer es una forma de vivir historias y acercarse a los peligros e incertidumbres del mundo. Cuanto más las incorporéis a vuestra vida y cuanto más os familiaricéis con esas historias, podréis después defenderos mejor. Cuando vengan el mal o el bien, los podréis reconocer».

https://www.zendalibros.com/los-mosqueteros-alatriste-y-el-capitan-garfio/

06 noviembre 2025

Pérez-Reverte presenta en Toledo el nuevo libro de Alatriste



Videonoticia: https://www.cmmedia.es/noticias/castilla-la-mancha/toledo/encuentro-perez-reverte-alumnos-secundaria-toledo.html

Europa Press - 06/11/2025

El escritor Arturo Pérez-Reverte ha presentado este jueves la octava entrega del capitán Alatriste, una nueva aventura del héroe español, que en esta ocasión viajará al París de los mosqueteros. Una presentación realizada en el Paraninfo Envases de Cartón de la Universidad de Castilla-La Mancha, enmarcada en los actos del Festival del Cine y la Palabra (CiBRA 2025).

Ante un auditorio abarrotado de estudiantes de los institutos Juanelo Turriano, Alfonso X, El Greco, Colegio Mayol y Universidad Laboral, Pérez-Reverte ha definido al personaje como "un viejo amigo", valorando la evolución que ha tenido desde la primera novela, publicada en 1996. "Un personaje es como un amigo con el que vives durante mucho tiempo", ha señalado el autor, explicando que al dedicar un año escribiendo la novela "terminas teniendo con él una gran afinidad" con los personajes. "Cuando un personaje llevas con él ocho novelas, la relación es muy íntima".

Respondiendo a preguntas de los estudiantes asistentes, Pérez-Reverte ha valorado la evolución del personaje a lo largo de tres décadas de aventuras, señalando que ahora Alatriste es "más amargo", un carácter adquirido a lo largo de años de experiencias que han hecho que el personaje sea "más oscuro, más amargo, más peligrosamente silencioso". Es una evolución que no se limita al propio Alatriste, apuntando que Íñigo Balboa, el joven narrador de las aventuras, también ha cambiado. "Al principio narraba de una forma inocente, de una forma más ingenua. Íñigo narraba desde la admiración. Ahora ya narra desde la más madurez", ha asegurado Pérez-Reverte. "Íñigo ya ve cosas que antes no veía". Es una evolución, ha señalado, que también ha tenido él mismo como autor. En este sentido, ha admitido que la forma de enfrentarse a la labor de escribir ha cambiado. "Los primeros libros me hicieron más feliz", ha admitido el autor, planteando que abordaba esas novelas "con una especie de inocencia. Aunque ahora, digamos, soy mejor escritor, echo en falta a ese escritor ingenuo, inocente, con menos experiencia que era cuando empecé a escribir".

Preguntado por los estudiantes por el proceso creativo de una novela, el escritor ha transmitido la importancia de adquirir un bagaje cultural antes de enfrentarse a un proceso creativo. Una formación que no solo ha ubicado en la lectura. "Leer, ver películas, videojuegos, o sea, moverte, conocer el mundo, moverte en el mundo de la imaginación, de la ficción, de los relatos, te permite comprender y conocer", ha asegurado. "Yo también juego a videojuegos", ha subrayado el autor, destacando que su narrativa también está atravesada por una cultura anterior. "Kratos es un personaje de videojuego, como lo sabéis muchos de vosotros, que se basa en la literatura clásica". El autor ha recomendado no precipitarse, ya que "nadie pone lo que no tiene. Por muy inteligente que uno sea, por mucha imaginación que tenga, por muy brillante que sea en el cole con los amigos, necesita tener material que estimule esa inteligencia, que nutre, que alimente esa inteligencia".

En cuanto a la creación de personajes, ha admitido que "no existe una fórmula" para hacer que un personaje llegue al público. Sin embargo, ha apuntado que "lo que hace que el lector se quede con el personaje es que sea original, que le descubra cosas que no podía descubrir sin ese personaje". Además, ha destacado la importancia de que el lector "se sienta próximo a él", ya que "la clave de que un libro funcione es que el lector se proyecte".

https://www.europapress.es/castilla-lamancha/noticia-perez-reverte-presenta-toledo-nuevo-libro-alatriste-octava-entrega-acude-paris-mosqueteros-20251106132512.html

"Este confort es artificial, el mundo real es mucho más duro"

El escritor Arturo Pérez-Reverte ha animado a escolares en Toledo a que se acerquen a la cultura para prepararse para un mundo "hostil", donde pasan cosas "muy buenas", pero también "muchas cosas malas". "Recordad siempre que este confort es artificial, el mundo real es otra cosa, es mucho más amargo, es mucho más duro", ha advertido el escritor, que ha protagonizado un encuentro con más de 600 alumnos de 3º de la ESO en el marco del Festival del Cine y la Palabra (Cibra).

El escritor ha contestado a preguntas de los asistentes sobre su experiencia como reportero de guerra y sobre las historias del capitán Alatriste, cuya última novela, 'Misión en París', ha comentado en el evento. Además, se ha realizado un espectáculo de esgrima con dos maestros espadachines disfrazados de personajes de las novelas del escritor y dos alumnos han leído un fragmento de uno de sus libros.

Como consejos, Pérez-Reverte ha instado a los jóvenes a que se acerquen a sus abuelos para que les cuenten sus experiencias, así como a la cultura y a los relatos, bien sea a través de la literatura, series, películas o videojuegos, porque el mundo "lo conoces leyendo y mirando. Leer, la cultura, ver películas, videojuegos: moverte en el mundo de la ficción y los relatos te permite comprender y conocer". En este sentido, ha señalado que cuando fue corresponsal de guerra, las cosas que vio no le traumatizaron porque "lo había leído todo antes. La guerra me confirmó lo que había leído. Cuanto más preparados estéis ahora, cuanta más información os metáis en la cabeza, más posibilidades tendréis de sobrevivir en un mundo hostil y peligroso", ha dicho Reverte, quien ha instado a los estudiantes a llenarse la "mochila" para cuando estén "solos".

De esa mochila, ha relatado, surgió la faceta como escritor de Pérez Reverte, según ha confesado, y ha admitido que su personaje más célebre, el capitán Alatriste, ha ido evolucionando con él, dando lugar a un personaje "más amargo" y con "remordimientos". A raíz de esto, el escritor ha apuntado que, aunque "quizás" sus libros sean mejores en la actualidad, los primeros que escribió le "hicieron más feliz. Ya no tengo esa ilusión y frescura".

También ha instado a los jóvenes que quieran ser escritores a que tengan paciencia y "lean mucho" para aprender de los "maestros" de la literatura trucos para atrapar al lector y ha compartido varios consejos para construir personajes o escribir.


Pérez-Reverte aconseja nutrirse de historias para afrontar «la realidad del mundo hostil y peligroso»

F Malara - abc.es - 06/11/2025

El escritor, periodista y académico español Arturo Pérez-Reverte ha recomendado en un encuentro con más de 600 jóvenes de Toledo, en el marco del Festival CiBRA, nutrirse de historias para estar preparados a la hora de afrontar la realidad «de este mundo hostil y peligroso».

«El mundo es un lugar peligroso y hostil donde pasan muchas cosas malas, aunque buenas también, pero sobre todo malas. Leer libros, ver películas o moverte en el mundo de la imaginación y de los relatos te permiten conocer. Así, cuando llegue el mundo real, el duro y complejo, sabréis distinguir. Cuanta más imaginación os metáis en la cabeza, más preparados estaréis para el mundo hostil y peligroso» ha explicado el autor.

Pérez-Reverte ha respondido todas las preguntas que los alumnos han querido hacerle, repasando su trayectoria como reportero de guerra y explicando, por ejemplo, cómo nació el personaje mítico de Alatriste, cuya octava entrega, «Misión en París», ha presentado durante el encuentro.

«Un personaje es un amigo con el que vives durante mucho tiempo y con el que terminas teniendo una gran afinidad, sobre todo cuando llevas ocho novelas con él. Alatriste viene de mi hija Carlota. A ella le gusta mucho el mar y queríaque conociese más sobre el siglo XVII, una época donde España era la actual Estados Unidos y que apenas se explicaba de pasada en la escuela. Por eso metí al mochilero Iñigo en la historia, para mostrar al héroe desde la figura de ese niño y, así, mi hija empezó a aficionarse a la historia de la memoria», ha confesado.

El escritor murciano ha subrayado que «un libro se empieza a escribir leyendo mucho», al tiempo que ha lamentado que «los escritores jóvenes tienen mucha prisa por publicar y eso les estropea. Hay que madurar, tener material, formarse, escribir, probar y tirar. Muchos han fracasado porque no han sabido esperar». En este sentido, ha añadido que la clave para que un libro funcione es que el lector se proyecte en él y sienta que forma parte de la historia.

Por otro lado, Pérez-Reverte ha repasado su trayectoria como corresponsal de guerra durante 21 años a raíz de las preguntas del público adolescente. El académico ha repetido en varias ocasiones que todas esas vivencias le motivaron a ser escritor. «Tenía tantas cosas en la mochila que con un artículo o reportaje no era suficiente. No me podía morir con ello», ha confesado el autor, quien ha dejado claro que aún le quedan muchas historias por contar. «Mientras siga teniendo recuerdos, escribiré novelas. Si algún día he rendido todas mis cuentas, lo dejaré, pero todavía me quedan muchas historias por resolver».


Reverte muestra a los jóvenes su «mochila» de experiencias

María José Lara - latribunadetoledo.es - 06/11/2025

Comenzó a escribir para sacar todas aquellas cosas que tenía en la mochila; las que fue acumulando tras 21 años cubriendo guerras como periodista. Por otro lado, la intención de que su hija conociera la historia española del siglo XVII le ayudó a la creación de uno de los personajes más inolvidables de la literatura patria: el capitán Alatriste. Sobre estos detalles en torno a su trayectoria y a su manera de ver la vida ha versado el encuentro que Arturo Pérez-Reverte ha mantenido esta mañana con más de 600 alumnos de cinco centros educativos de Toledo en el marco del Festival del Cine y la Palabra (CIBRA). 

Con el mensaje de que «sin alimento, la inteligencia no va a ninguna parte», el escritor, que publicó el pasado mes de septiembre 'Misión en París' (Las aventuras del capitán Alatriste 8), ha trasladado a jóvenes adolescentes la importancia de leer, ver series y películas o, incluso, jugar a videojuegos, para comprender mejor el mundo. Un mundo que es «más amargo y más cruel» que el «confort artificial» al que estamos acostumbrados. «No os descuidéis.  No creáis que va a durar siempre el confort la mano de mamá y de papá», ha dicho a los jóvenes, a los que ha animado a seguir formándose porque «cuanta más información os metáis en la cabeza, mejor podréis sobrevivir». 

Ingenuidad perdida. Durante más de una hora, un entregado público, que ha llenado el salón de actos del paraninfo de Envases de Cartón de la Fábrica de Armas, ha hecho las veces de periodista realizando preguntas. La mayoría, muy pertinentes. Sobre cómo se comienza a escribir un libro, confiesa que «leyendo» y, después, «escribiendo y tirando lo escrito». Para Reverte, las prisas no son buenas para los escritores, los cuales se arriesgan a fracasar si publican un libro que no está suficientemente maduro. «Esperar el momento adecuado» es la clave, así como recurrir a los clásicos. «Cuando tengo un problema voy a la biblioteca», confiesa.

No ha renunciado Reverte a mostrar sus debilidades, haciendo hincapié en el «duro trabajo» que supone buscar el «aroma» del lenguaje de la época en la que se enmarca Alatriste con un vocabulario que se pueda entender. También ha reconocido que la tarea más tediosa de escribir es corregir lo escrito y que echa en falta esa ingenuidad con la que comenzó su trayectoria como escritor. «Los primeros libros me hicieron más feliz. Ser bueno o malo es relativo». Después de 30 años, Alatriste sigue enganchando a sus lectores, aunque su autor confiesa que «no existe una fórmula» para que un personaje funcione más allá de que la gente se sienta identificada con él. 

Reverte, que se pensaba un mosquetero más, asegura que, después de los años, ya tiene «una relación muy íntima» con Alatriste, aunque ahora sea «un héroe más amargo y cansado». El personaje tiene pasado, igual que el escritor, que ha relatado algunos de los episodios más duros que vivió en el Líbano, El Salvador o Sudán. En Eritrea, la primera vez que combatió, estuvo a punto de morir varias veces, tanto por el conflicto como por la disentería. Y en Los Balcanes fue testigo de atrocidades como «matar a pueblos enteros, degollar a todos los hombres o que un grupo entero violase a una joven». Por eso desprecia la «manipulación» que realizan los demagogos que arrastran a sociedades enteras a las guerras, aunque, según su experiencia, las personas combaten, en su mayoría, «por lealtad» a sus compañeros y a las cosas por las que creen. 

Poco ha endulzado hoy sus intervenciones Pérez-Reverte, ya que se ha mostrado favorable de no ocultar «las partes más oscuras de la vida» a los más jóvenes, a los que se ha encargado de repetirles que ser bueno o malo «es relativo». «Todos podemos ser buenos y malos según las circunstancias», ha indicado, y por ello es importante «aprender a mirar» con la equidistancia necesaria. A él, todavía le quedan muchas cosas que mirar y muchas vivencias por ordenar. «Si algún día he ajustado todas las cuentas, dejaré de escribir», ha sentenciado. 


Pérez-Reverte presenta la nueva aventura del Capitán Alatriste en CiBRA 2025

eldiariodetoledo.com - 06/11/2025

El reconocido escritor Arturo Pérez-Reverte ha dado a conocer este jueves la octava entrega de las aventuras del Capitán Alatriste, un personaje que, en esta ocasión, emprenderá un viaje hacia el París de los mosqueteros. La presentación tuvo lugar en el Paraninfo Envases de Cartón de la Universidad de Castilla-La Mancha, en el marco del Festival del Cine y la Palabra (CiBRA 2025). Durante su intervención, Pérez-Reverte describió al Capitán Alatriste como «un viejo amigo», reconociendo la evolución del personaje desde su primera novela, publicada en 1996.

«Un personaje es como un amigo con el que vives durante mucho tiempo», expresó el autor, quien explicó que al dedicar un año a la escritura de una novela, se desarrolla una gran afinidad con los personajes. «Cuando llevas ocho novelas con un personaje, la relación se vuelve muy íntima». En respuesta a las preguntas de los estudiantes, el autor reflexionó sobre cómo Alatriste ha cambiado a lo largo de tres décadas de aventuras, destacando que su carácter ha adquirido una dimensión «más amarga». Este nuevo matiz, según Pérez-Reverte, se debe a los años de experiencia que han oscurecido y vuelto más silencioso al personaje.

La transformación no se limita solo a Alatriste, ya que también Íñigo Balboa, el joven narrador de las historias, ha evolucionado. «Al principio, narraba de una forma inocente y con admiración. Ahora, lo hace desde una perspectiva más madura», explicó Pérez-Reverte, quien subrayó que Íñigo ahora percibe aspectos que antes le eran ajenos. El autor también reflexionó sobre su propia evolución a lo largo de los años. Admitió que su enfoque hacia la escritura ha cambiado: «Los primeros libros me hicieron más feliz», confesó, señalando que los abordaba con una «especie de inocencia». A pesar de considerarse un mejor escritor ahora, reconoció que extraña al autor ingenuo que era al inicio de su carrera.

Al ser cuestionado por los estudiantes sobre su proceso creativo, Pérez-Reverte enfatizó la necesidad de contar con un sólido bagaje cultural antes de embarcarse en la escritura. Esta formación, según él, no solo proviene de la lectura, sino de una variedad de experiencias. «Leer, ver películas, jugar a videojuegos, moverte y conocer el mundo de la ficción te permite comprender mejor», afirmó el autor, quien también se identificó como un jugador de videojuegos.

En cuanto a la creación de personajes, Pérez-Reverte reconoció que no hay una fórmula mágica para captar la atención del público. Sin embargo, destacó que la originalidad y la capacidad de un personaje para revelar aspectos desconocidos son cruciales. «La clave para que un libro funcione es que el lector se sienta próximo al personaje», concluyó, subrayando la importancia de la proyección del lector en la obra.

05 noviembre 2025

Carta a Pérez-Reverte de un ex preso

Twitter / X - 05/11/2025

"Siempre dije que un lector es un amigo; pero hay cartas de lectores que valen mucho más que cualquier reseña favorable, elogio de editor o premio literario". (Tuiteo original)

(Traducción)

Querido señor Pérez-Reverte:

Hace once años, me envió usted la carta adjunta mientras yo estaba encarcelado en el sistema penitenciario del estado de ---. Sus palabras me sostuvieron durante esos años, pero más aún, sus libros se convirtieron en mis maestros, mis compañeros, mi salvavidas.

El capitán Alatriste me mostró que el honor y la dignidad podían sobrevivir incluso en mis propias circunstancias. Igual que Alatriste fue el mentor de Íñigo Balboa, los personajes de usted se convirtieron en mis guías por la complejidad moral de la supervivencia.

'El pintor de batallas' fue transformador. Me ayudó a entender la naturaleza humana y a encontrar geometría en el caos de mi vida diaria en la prisión. Su exploración de la guerra, la memoria y los patrones dentro de la violencia me dio un marco de referencia para entender la brutalidad a mi alrededor.

'El tango de la Guardia Vieja' inspiró un capítulo entero de mis memorias sobre hacer que mi madre me enviara estudios sobre el tango, para poder dominar el arte detrás de ello. Mientras otros soñaban con beber cerveza, fumar canutos, coches rápidos y mujeres, yo soñaba con el tango. Su libro me hizo ver la belleza, la disciplina, la poesía en ese baile. Cuando volví a casa fui a clases y antes de que mi abuela falleciera a los 98 pude bailar el tango con ella ante nuestros amigos y familia. Un momento que existe porque usted plantó esa semilla con su escritura.

Durante un tiempo, sus libros me hicieron querer hacerme corresponsal de guerra, como usted. Mi mamá dijo: “¡De eso nada!”. Pensó que había perdido la razón. Quizá así era, pero no estaba loco. Estaba vivo,, incluso en prisión, en aquel lugar, porque sus historias me mostraron cómo vivir con un propósito y con honor.

Quería que supiera usted que esta inspiración me llevó a escribir. He terminado unas memorias de preso sobre el sobrevivir a una sentencia de 10 años en el brutal sistema de prisiones estatales de --- y encontrarme a mí mismo. (---)

Cuando esté acabada, sería un profundo honor enviarle una copia. No pido nada, solo quiero mostrarle lo que creció de las semillas que plantó con su amabilidad y su arte.

Su carta fue un faro. Sus libros mi universidad. Ese tango con mi abuela mi ceremonia de graduación.

Con profunda gratitud, ---.

P.S. ¡'El Club Dumas' fue excelente también!

Gracias.





El día que Pérez Reverte usó su influencia en Twitter para ayudar a María Esteve: "No puedo dejar de darle las gracias"

Cadena SER - 05/11/2025

Hace justo diez años, la actriz María Esteve tuvo que hacer frente a una de las pérdidas más dolorosas de su vida. La hija de Marisol y del bailarín Antonio Gades acudió a las redes sociales para iniciar una campaña pidiendo ayuda para encontrar a su perra Catalina, que desapareció en la Cala del Moral, el pueblo de Málaga donde ella reside. "Mi perra Cata lleva desde anoche perdida, asustada y sola en La Cala del Moral. Málaga. Ayudadme por favor. Lo suplico", escribió la actriz en su perfil de X.

Esteve ha recordado a su mascota y, sobre todo, a la gran difusión y colaboración que logró en redes sociales en el último programa de 'El faro', donde la actriz, además, ha elegido el seudónimo "Catalina 81" al principio de la entrevista, precisamente en su honor. "Seguramente habrá gente que nos esté escuchando que recordará a Catalina porque me ayudó todo el mundo. Catalina se perdió y yo entré en todos los programas desesperada, pidiendo ayuda por si alguien la había visto", ha explicado.

Entre los cientos de usuarios que se volcaron en la tarea de difundir las fotos de la perra y compartir los mensajes de María Esteve —que dieron la vuelta a España en su momento—, la actriz ha destacado el papel que jugó el escritor Arturo Pérez-Reverte, muy activo en X y popular por sus mensajes, que en ocasiones consiguen una gran repercusión. "Pérez-Reverte lo tuiteó y se hizo "trending topic". Venía gente de todos los lugares a Málaga a buscar a Catalina", ha recordado.

Desgraciadamente, y a pesar del esfuerzo infrahumano que realizó Esteve para recuperar a uno de los grandes pilares de su vida, Catalina nunca apareció. No obstante, la actriz sigue a día de hoy muy agradecida por todo el apoyo que recibió en su día. "No puedo dejar de darle las gracias, si todavía hay alguien por ahí que me está escuchando, a toda la gente que hizo porque Catalina apareciera. Uno de los grandes amores de mi vida, Catalina", concluía.

https://cadenaser.com/nacional/2025/11/05/el-dia-que-perez-reverte-uso-su-influencia-en-twitter-para-ayudar-a-maria-esteve-no-puedo-dejar-de-darle-las-gracias-cadena-ser/

04 noviembre 2025

Presentación de la colección Zenda-Edhasa en Peñafiel


Vídeo completo:

https://www.youtube.com/watch?v=GOe_RWxZFLk

Una velada literaria en Bodegas Protos celebra la nueva edición de Los tres mosqueteros de Zenda–Edhasa

María Choza Merino - zendaedhasa.com - 04/11/2025

Bajo las bóvedas de Bodegas Protos, entre barricas y el aroma del vino, Zenda-Edhasa ha presentado esta mañana su nueva edición de 'Los tres mosqueteros', de Alejandro Dumas, con un prólogo inédito de Arturo Pérez-Reverte. La cita reunió al escritor junto a la periodista y cofundadora de Zenda, María José Solano, y al presidente y editor Daniel Fernández, en una conversación dedicada a sus grandes clásicos de aventuras reeditados y al alma de los personajes que los habitan.

El encuentro repasó los títulos que conforman la colección Zenda-Edhasa, un proyecto editorial que busca recuperar y reivindicar las novelas que forjaron el imaginario de generaciones enteras. Pérez-Reverte subrayó el valor literario de esos relatos en los que el heroísmo convive con la duda, y donde los villanos desempeñan un papel decisivo. Se habló de aquellos que nacen con la maldad frente a los que la adquieren con los años, y de cómo estos últimos, movidos por un motivo o un propósito, resultan siempre más complejos y peligrosos, pero ciertamente mucho más interesantes.

Uno de los momentos centrales de la jornada fue la referencia al prólogo inédito, una conversación imaginaria entre Alejandro Dumas y el capitán Alatriste que Pérez-Reverte mencionó de pasada, dejando en el aire los detalles para que sean los lectores quienes los descubran. El autor mencionó esa conexión entre ambos mundos, apuntando que el lado oscuro de Alatriste nace de las sombras y la oscuridad de Athos, uno de los tres mosqueteros.

Durante la charla, Pérez-Reverte recomendó a los lectores más jóvenes dos títulos de la colección Zenda-Edhasa: 'Peter Pan', de J. M. Barrie, y 'El enigma de las arenas', de Robert Erskine Childers, ejemplos de la mejor literatura de aventuras y del espíritu atemporal que la colección busca mantener vivo.

La mañana literaria comenzó con una visita guiada a las instalaciones históricas de Bodegas Protos, que puso de relieve la estrecha relación entre vino, patrimonio y cultura, y concluyó con un vino de cortesía compartido entre libreros, periodistas y clubes de lectura.

La nueva edición de 'Los tres mosqueteros', con lámina desplegable, portada del afamado pintor Augusto Ferrer-Dalmau y un cuidado diseño editorial, al que ya nos tiene acostumbrados, continúa la labor de Zenda-Edhasa de devolver a los clásicos de aventuras su brillo original y acercarlos a los lectores contemporáneos.


Pérez-Reverte apela a la lectura y al cine para “sobrevivir”

DV - El Día de Valladolid - 04/11/2025

El escritor, periodista y miembro de la Real Academia Española (RAE) Arturo Pérez-Reverte advirtió este martes que cada vez son menos las “referencias que tenemos para identificar el mundo”, a la vez que animó a niños y jóvenes a dedicarle más tiempo a la lectura y al cine para poder “sobrevivir”.

Pérez-Reverte, que esta mañana ofreció un conferencia en Bodegas Protos, a la que asistieron estudiantes del instituto de Peñafiel, aseguro que “entre unos y otros a veces nos están privando de todo aquello que nos permite comprender y conocer. Y eso que ya no lo dan casi ni los colegios, ni los gobiernos y, a veces, ni siquiera los padres, está ahí, está en los libros, en las películas y en los videojuegos”. En este sentido, apeló a la lectura y el cine y aseguró que “cuanto más os mováis por ellos y cuanto más os familiaricéis con los villanos, mejor podréis defenderos después y sobrevivir a un mundo que es un territorio hostil donde pasan muchas cosas malas. Cuando venga el mal podréis reconocerlo, y también cuando venga el bien”. A su vez, reconoció que lo que más le ha ayudado a “sobrevivir, vivir, pelear, caminar, amar, odiar y estar vivo” son los libros y las películas que vi cuando era pequeño”, informa Ical.

Arturo Pérez-Reverte y María José Solano presentaron hoy la nueva colección de libros de aventura de Zenda, cuyo primer título [sic] ha sido ‘Los tres mosqueteros’, de Alejandro Dumas. El objetivo de la editorial es rescatar y devolver a las librerías esos clásicos, a veces olvidados o dispersos y que raramente vuelven a ser editados. 

https://lacronicadesalamanca.com/646722-perez-reverte-apela-a-la-lectura-y-al-cine-para-sobrevivir/

Pérez-Reverte: «El Nobel está muy devaluado»

Lorena Torío - El Debate - 04/11/2025

El académico, escritor y periodista Arturo Pérez-Reverte ha asegurado que no siente interés por el Pulitzer ni por el Nobel de Literatura, un galardón (este último) que considera que está «muy devaluado». «Javier Marías, que era amigo mío, murió sin el Nobel, y eso ya hace que para mí ese premio haya perdido muchísima categoría", dijo durante la presentación de la nueva colección de obras clásicas de Zenda-Edhasa. Pérez-Reverte insistió en que los premios no son el fin del oficio, y que su verdadera recompensa es el lector. «El premio no es el galardón, son los lectores. Cuando leen un libro y te dicen que les ha cambiado la vida, ese es el premio. Ninguno de los premios que tengo me hace más feliz que si no los tuviera», señaló.

El encuentro, organizado por la editorial Zenda-Edhasa, fundada por él mismo y Juan Eslava Galán, y celebrado en la Bodega Protos de Peñafiel, sirvió también para presentar títulos recuperados de la literatura universal, desde 'Los tres mosqueteros', de Alejandro Dumas, hasta 'Juventud', de Joseph Conrad, o 'La máscara de Dimitrios', de Eric Ambler, y para reivindicar la importancia de las aventuras como escuela vital. «Los libros, las películas y los videojuegos te preparan para la vida, para cuando vienen los malos momentos», subrayó el escritor, que recordó cómo la lectura lo ayudó a afrontar sus años como corresponsal de guerra. «Cuando fui a mi primera guerra, ya lo había leído todo. La guerra no fue un trauma porque los libros me habían enseñado a digerirla.»

Al ser preguntado por los jóvenes y la violencia actual, Pérez-Reverte se mostró crítico con la pérdida de referentes y con la falta de lecturas que ayuden a comprender el mundo. «Vivimos en un territorio hostil. Si lees, estás preparado para aceptar que el dolor, la tragedia o la guerra son tan naturales como la felicidad», explicó. En alusión a los conflictos como el de Gaza, recordó que el problema de Occidente es que hemos dejado demasiados «villanos posibles alrededor» y saben perfectamente las cuentas que tienen con nosotros.

El académico cerró su intervención asegurando que «entre unos y otros a veces nos están privando de todo aquello que nos permite comprender y conocer. Y eso que ya no lo dan casi ni los colegios, ni los gobiernos y, a veces, ni siquiera los padres, está ahí, está en los libros, en las películas y en los videojuegos», concluyó.

https://www.eldebate.com/espana/castilla-y-leon/20251104/perezreverte-nobel-esta-devaluado_351695.html

Arturo Pérez-Reverte presenta la nueva colección de libros de aventuras de Zenda-Edhasa en Bodegas Protos

El Mundo - 04/11/2025

Arturo Pérez-Reverte ha presentado este lunes en las Bodegas Protos de Peñafiel, en Valladolid, la nueva colección de libros de aventuras del sello Zenda-Edhasa, que rinde homenaje a los grandes clásicos del género. Pérez-Reverte ha conducido el acto junto a la editora de Zenda-Edhasa María José Solano, acompañados por Carlos Villar, director general de Bodegas Protos.

Durante el encuentro, Solano y Pérez-Reverte han hablado sobre los distintos títulos de la colección de aventuras y han destacado el papel del villano como una de las figuras más fascinantes del mundo literario. En este sentido, Pérez-Reverte ha señalado cómo los libros de aventuras han marcado su infancia y, en particular, la figura del villano, y ha resaltado al capitán Garfio como su favorito. "Lo que más me ha permitido sobrevivir, vivir, pelear, caminar, amar, odiar, sufrir, ser humano, estar vivo, son los libros y las películas que vi cuando era pequeño. Ahí tenéis las herramientas para enfrentar los inconvenientes de la vida", ha puntualizado el autor de la saga Alatriste.

La nueva colección nace con el objetivo de rescatar clásicos atemporales que rara vez vuelven a editarse para devolverlos al lector con una cuidada edición y el sello de calidad de Zenda y Edhasa. El primer volumen [sic], 'Los tres mosqueteros', ofrece una lectura renovada del clásico de Dumas, con un prólogo de Pérez-Reverte que imagina un diálogo entre el escritor francés y su personaje más emblemático, el Capitán Alatriste, como un homenaje al espíritu de la aventura, el honor y la palabra dada.

Con este encuentro en Bodegas Protos se cierra un círculo literario. El primer título presentado de la colección ha sido 'Los tres mosqueteros', de Alejandro Dumas, y la última novela de Arturo Pérez-Reverte, 'Misión en París', retoma ese mismo espíritu. Su protagonista, el capitán Alatriste, personaje inspirado en Athos, uno de los mosqueteros, mantiene en esta nueva obra un diálogo imaginario con todos los mosqueteros, como si la aventura continuara a través del tiempo.

Bodegas Protos cuenta con un espacio único dentro de sus instalaciones: El Reino de las Letras, un rincón dedicado al mundo de los libros que alberga obras desde el Siglo de Oro hasta la actualidad. Su rey de las letras es Miguel Delibes, figura esencial de la literatura castellana y "símbolo del profundo vínculo entre la tierra, la palabra y la autenticidad", afirma la presentación de la bodega.

https://www.elmundo.es/cultura/literatura/2025/11/04/690a23b8fdddff64088b4593.html

Arturo Pérez-Reverte brinda con Dumas y Alatriste en la presentación de Los tres mosqueteros, de Zenda-Edhasa, en Bodegas Protos

Damián León - queestapasando.com - 04/11/2025

En el incomparable escenario de Bodegas Protos, Zenda-Edhasa ha celebrado la presentación oficial de su nueva edición de 'Los tres mosqueteros', de Alexandre Dumas, con un prólogo inédito de Arturo Pérez-Reverte. Una edición especial que reúne, por primera vez, a dos grandes espadachines de la literatura: el capitán Alatriste y los mosqueteros de Francia, en un diálogo imaginario lleno de ingenio, honor y melancolía.

El acto, organizado por Zenda-Edhasa en colaboración con Bodegas Protos, contó con una conversación entre la periodista y escritora María José Solano, cofundadora de Zenda, y Arturo Pérez-Reverte. Durante el coloquio, los dos reflexionaron sobre todos los clásicos de la colección Zenda-Edhasa, el legado literario de sus personajes, el atractivo de los villanos y la pervivencia de los valores que encarnan.

La jornada comenzó con una visita guiada a las históricas instalaciones de Bodegas Protos, donde los asistentes pudieron conocer la estrecha relación entre vino, cultura y patrimonio. Siguió la citada presentación en compañía de libreros, estudiantes, medios de comunicación y clubes de lectura, y concluyó con un vino de cortesía, brindando por la literatura y por la nueva vida de un clásico que, casi dos siglos después, sigue deslumbrando a generaciones enteras.

En su prólogo, Pérez-Reverte imagina un encuentro entre Dumas y su creación más universal, Alatriste, en una conversación que trasciende el tiempo y la frontera de los géneros. Los dos pertenecen a esa raza extinta de hombres que se baten por algo más que la victoria: por un código, por una forma de habitar el mundo.

La edición, que incluye una lámina desplegable y un cuidado diseño editorial, continúa la labor de la colección Zenda-Edhasa, dedicada a recuperar los grandes relatos de aventuras.

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Arturo Pérez-Reverte, el quinto mosquetero

Javier Menéndez Flores - La Razón - 04/11/2025

Lo reconoció con un leve encogimiento de hombros, como algo obvio o casi inevitable: «Toda la vida me la he pasado buscando a amigos como los tres mosqueteros, o mujeres como Milady de Winter o Constance Bonacieux». Arturo Pérez-Reverte, en presencia de la escritora y editora María José Solano, reveló que leyó por primera vez la historia de Athos, Porthos, Aramis y D’Artagnan cuando era un niño menudo, pero de imaginación ya desbordante y proclive a la magia que destilan las grandes historias.

Él también recibió su aleccionamiento de vida en su propio Long John Silver, un marino viejo, contrabandista de oficio y muy bregado en el mar, que le ofreció su primer cigarrillo y del que aprendió que hay que despedirse de la vida antes de que a uno lo desguacen. La memoria de esos días queda atrás, pero no el sabor de las emociones que conoció a través de estos espadachines, con sus sombras y pecados, también con sus fidelidades y gallardías, que afianzaron amistad en más de un duelo bajo el lema «uno para todos y todos para uno». «Con este libro entendí que un lector puede proyectarse en un libro. Me cambió la vida por eso, porque me sumergí en su texto. Gracias a estos personajes descubrí la amistad, la lealtad y a los enemigos».

En un entorno privilegiado, que, sin duda, hubiera agradado al propio Alejandro Dumas, probado gastrónomo y gran catador de caldos, las bodegas Protos, en Peñafiel, el novelista presentó la nueva edición de 'Los tres mosqueteros' que publica Zenda-Edhasa y que sale ahora con traducción revisada y actualizada, y un prólogo inédito firmado por él mismo. Una introducción que propone, nada menos, que un encuentro entre Alejandro Dumas con otro hombre de armas, no de menor valía, aunque de horma y carácter distintos a los de los protagonistas franceses: el capitán Alatriste. «Él es más oscuro, es un asesino a sueldo, tiene sombras, recuerdos, mientras que los mosqueteros tienen otras lealtades. Alatriste quizá se parece a Athos, que se emborracha, que tiene el pasado de su mujer. Es de quien nace Alatriste, por eso se bate con él en 'Misión en París' (Alfaguara) –la última aventura de su célebre soldado de tercios–, porque los dos se entienden bien y tienen una altura moral bastante similar».

Arturo Pérez-Reverte admitió que uno de sus malos preferidos es el conde de Rochefort. «Junto al capitán Garfio y el cocodrilo que aparecen en 'Peter Pan'», corrió a apuntar. Aseguró que, junto a Richelieu, marcó una línea dinástica de villanos que ha llegado hasta hoy. «Hay malos que nacen malos y otros que se hacen malos por la vida. Los peores son estos últimos porque saben por qué son malos, tienen argumentaciones y saben muy bien por qué quieren ajustar las cuentas contigo. El problema de Occidente es que ha creado demasiados villanos y ahora nos quieren venir a ajustarnos esas cuentas». El escritor aprovechó la ocasión para subrayar la relevancia que tiene esta novela y la lectura temprana en la formación del carácter y ofrecer un horizonte más amplio a la mirada. «Lo que me ha permitido sobrevivir es la lectura, porque te familiariza con la maldad, y puedes reconocerla antes cuando venga a encontrarte. El problema hoy es que los jóvenes cuentan cada vez con menos referencias para entender el mundo. No las reciben en la educación y a veces tampoco en casa. Por eso hay que leer».



Las justas literarias de Dumas y Pérez-Reverte en Valladolid

Karina Sainz Borgo - ABC - 04/11/2025

En la Francia del XVII, bajo el reinado de Luis XIII, llega a París D'Artagnan, un joven gascón decidido a convertirse en mosquetero del rey. Allí se cruza con Athos, Porthos y Aramis. Unidos por el célebre lema «todos para uno y uno para todos», el escritor Alejandro Dumas convirtió a estos espadachines en el eje de 'Los tres mosqueteros', un clásico universal que convirtió en escritores a los más voraces lectores.

La primera vez que leyó aquel libro, Arturo Pérez-Reverte era apenas un niño. El hallazgo le sirvió para entablar un viaje hacia la imaginación literaria. Así lo ha explicado el escritor ante un auditorio de más de cien personas, en el municipio de Peñafiel, Valladolid, donde el sello Zenda-Edhasa ha presentado una nueva edición del clásico literario con prólogo de Arturo Pérez-Reverte e ilustraciones de Augusto Ferrer-Dalmau.

Este es el decimocuarto título publicado por Zenda-Edhasa, editorial dedicada a la literatura de aventuras que ahora recupera el clásico de Dumas. «Lo leí con ocho o nueve años», aseguró este martes Arturo Pérez-Reverte. «Entonces descubrí que la literatura es proyectarte sobre algo y que yo me sentía parte de eso. Toda mi vida he intentado cumplir con lo que ese libro me dejó: la aventura, los viajes, la lealtad, los amigos, los enemigos, las mujeres peligrosas... Me marcó no solo como lector sino como persona», comentó el escritor y académico de la lengua en una conversación con María José Solano, editora del sello.

Los escuchan con atención lectores, libreros, periodistas y profesores, además de un nutrido grupo de alumnos del Instituto Conde de Lucanor. A ellos explicó Pérez-Reverte la profunda relación que su afamado capitán de los tercios tiene con los mosqueteros de Dumas. «El personaje de Alatriste nace de los mosqueteros. Quise hacer una historia de un equivalente español. Si bien los mosqueteros tienen lealtades, Alatriste es un personaje distinto. Es un profesional. De los mosqueteros quien más se parece a Alatriste es Athos, el que tiene remordimiento, el que se emborracha… Esa dignidad en el remordimiento de Athos es de donde nace Alatriste».

En el prólogo de la edición de 'Los tres mosqueteros' que se ha presentado en Valladolid, Arturo Pérez- Reverte firma una pieza singular y sorprendente: un breve relato en el que hace coincidir en el tiempo y en la ficción a Alejandro Dumas y al capitán Alatriste, su icónico personaje de la saga publicada hace ya treinta años y que regresa ahora con ''Misión en París', publicada por Alfaguara en septiembre de este año. «Lo del prólogo ha sido una chulería», asegura Pérez- Reverte, riéndose, para referirse al encuentro de dos mundos que comparten la épica del honor, la aventura y la amistad.

Acompañados por Daniel Fernández, director de Edhasa, casa editorial asociada en esta aventura, María José Solano y Arturo Pérez-Reverte han hecho un repaso por el nutrido catálogo de un sello que nació con la intención de recuperar los grandes clásicos universales de la aventura. Sus historias están pobladas de héroes que encarnaron la moral y las virtudes clásicas de las que parece necesitar un mundo saqueado de ellas y más hambriento que nunca de aventuras.

La colección Zenda-Edhasa reúne una cuidada selección de clásicos de aventuras universales, presentados en ediciones de lujo con prólogos de grandes autores y portadas de Augusto Ferrer-Dalmau. En conjunto, la colección revive el espíritu del viaje, la acción y el heroísmo que definen la novela de aventuras. Una biblioteca a disposición de lectores de todas las edades.

A lo largo de la conversación, celebrada en las bodegas Protos, en Peñafiel, Arturo Pérez-Reverte ha insistido en un mensaje para los más jóvenes del auditorio: la importancia de la literatura como experiencia vital. Cerca de cincuenta chicos y chicas de secundaria escuchan con toda la atención que la adolescencia les permite. Se dan codazos a veces y se revuelven en las sillas, sin embargo atienden, de sobra, al mensaje del escritor y académico de la lengua: «Antes de irnos quiero decirles algo: leer es una forma de vivir historias y acertarse a los peligros e incertidumbres, del mundo. Cuanto más incorporéis a vuestra vida y cuánto más os familiaricéis con esas historias, os podréis defender mejor. Cuando vengan el mal o el bien, los podréis reconocer».

Tras una pausa, Pérez-Reverte insistió: «Si uno ha leído, sabe identificar a las ratas. Mi consejo es: mirad a los buenos, pero no perdáis de vista a las ratas. Igual que el enemigo, que es como el mar. Te ayuda a precaverte. Saber que esta ahí, aunque no se manifieste. Saber que te acecha esperando que te descuides. Eso te mantiene vivo. Ese es el estado de saludable incertidumbre del que habla Conrad y que me ha mantenido alerta siempre».

02 noviembre 2025

Arturo Pérez-Reverte y la tercera guerra del Bacalao

Francisco Correal - Diario de Sevilla - 02/11/2025

El día que muere Franco, ni su familia ni el diario 'Pueblo' en el que trabajaba tenían noticias del paradero de Arturo Pérez-Reverte (Cartagena, 1951). La tranquilidad llegó con este titular aparecido el 21 de noviembre de 1975 en 'Nuevo Diario', periódico que dirigía Manuel Martín Ferrand: "Dos periodistas españoles, con el Frente Polisario". A Pérez-Reverte le acompañaba en esta aventura por el Sahara Antonio Bernabé Pertusa, de la agencia Pyresa, que con el paso de los años se convertiría en un especialista en la obra de Miguel Hernández.

“Después de seis días sin tener noticias de ellos, han llegado a El Aaiún los periodistas españoles Antonio Bernabé Pertusa, de la agencia Pyresa, y Arturo Pérez-Reverte, del diario 'Pueblo', que salieron el pasado viernes de esta localidad para ponerse en contacto con las guerrillas del Frente Polisario”. La falta de noticias también había creado inquietud entre las propias autoridades militares del Sahara. Según contaron ellos mismos, pasaron una semana durmiendo en el suelo y al aire libre “comiendo fideos o arroz hervido en una sola perola”. Lograron localizar y entrevistar al secretario general del Frente Polisario, El Uali Mustafa Sayed, y contaban que “los guerrilleros saharauis se mantienen en lucha contra los marroquíes”. Cinco días después de la muerte de Franco, Arturo Pérez-Reverte cumplía 24 años.

El diario 'Pueblo' lo dirigía Luis Ángel de la Viuda (1932-2025), fallecido recientemente. Raúl del Pozo (Mariana, Cuenca, día de Navidad de 1936) era corresponsal en Lisboa. "Triunfo de los moderados", titulaba su crónica del 27 de noviembre de 2025. “El 25 de abril ha sido gravemente dañado por el 25 de noviembre”, escribía en referencia a una aventura golpista de un grupo de militares. Raúl del Pozo se hizo cargo de la columna de la última página del diario 'El Mundo' tras la muerte de Francisco Umbral en agosto de 2007.

Otro Reverte que después se convertiría en escritor de éxito formaba parte de la plantilla de 'Pueblo'. Javier Martínez Reverte (1944-2020) era corresponsal en París e informaba de las reacciones en Francia tras la muerte de Franco. En su carrera literaria suprimió el Martínez, tal vez para no confundirse con su hermano, el también periodista y escritor Jorge Martínez Reverte. José María Carrascal era el corresponsal en Washington y enviaba una crónica dedicada al debate sobre el Sahara en la ONU. Mariano Medina, el histórico hombre del tiempo, llevaba la sección de Meteorología. “El domingo habrá fútbol”, se lee en el 'Pueblo' del 20 de noviembre de 1975. Firmaba la información Juan Manuel Gozalo (1944-2010), una leyenda del periodismo deportivo que presentó 'Radiogaceta de los deportes' y cubrió once Juegos Olímpicos.

“Por teléfono, de nuestro enviado especial”. Así encabezaba sus crónicas Diego Carcedo, a quien el periódico le encomendó la cobertura de la guerra del Bacalao desde Reikiavik. En 1975 había terminado la guerra del Vietnam y empezaba el 16 de noviembre, cuatro días antes de la muerte de Franco, la tercera guerra del Bacalao. Las dos anteriores tuvieron lugar en 1959 y 1972. Una disputa entre Inglaterra e Islandia por los derechos de pesca que en el conflicto de 1975 se extendió a otros países: Finlandia amenazó con boicotear la sesión de la OTAN. La presencia de un marinero español en un barco británico en aguas islandesas planteó un conflicto diplomático que el propio Diego Carcedo (Cangas de Onís, Asturias, 1940) narró en primera persona. “Un marinero español, primera víctima de la guerra del bacalao”. El barco en el que iba se llamaba Otelo, estaba con una fuerte depresión y en conversación con Carcedo, la enfermera que le atendía le dijo al periodista que “es muy simpático; no habla nada de inglés y, por supuesto, nada de islandés, pero ya hemos conseguido entenderlo”. El propio Carcedo, que con los años sería director de los Servicios Informativos de Televisión Española y director de Radio Nacional de España, consiguió hablar con el marinero. El comienzo de la charla fue de lo más surrealista. “¿Usted es Miguel de la Cuadra? Bueno, es igual, querrá ayudarme”. La fuerte nevada impedía su traslado a la capital islandesa. Tenía 25 años, “es solterón”, añade el periodista. Nació en Arjona, el pueblo de Juan Eslava Galán, que con los años se haría amigo inseparable de Pérez-Reverte, pero su familia había emigrado a San Baudilio de Llobregat, Barcelona. Estarían igual de preocupados por su falta de noticias que la familia de los dos periodistas perdidos en el desierto del Sahara. “Mi padre se llama Andrés. No tenemos teléfono, eso es lo malo… Estos países no son para mí, resultan muy aburridos. Tengo una depresión horrible encima. Jamás me hubiera metido en esto de la guerra del bacalao”, le decía el marinero al enviado especial por teléfono desde Reikiavik.

Luis Ángel de la Viuda, Manuel Martín Ferrand, Raúl del Pozo. Maestros del periodismo llevando el timón en días en los que se escribía con tinta de rotativa la historia de España. A la redacción de 'Nuevo Diario' pertenecía Felipe Navarro, nombre de pila del sobrenombre periodístico que le dio notoriedad, Yale, cordobés de nacimiento (1930-1994). El 22 de noviembre de 1975 se anunciaba la salida a la venta de su libro 'Los últimos cien días: Crónica de una agonía'. Era el padre de Julia Navarro, hoy novelista de éxito, que tenía 22 años.

El Tribunal de Orden Público pedía dos años de prisión para el periodista Federico Villagrán, director de 'El Correo de Andalucía', por la publicación el 25 de marzo de 1975 de la noticia de un supuesto desembarco de marines norteamericanos en la basa de Rota. El Tribunal de Orden Público, la última herramienta del franquismo, desapareció el 3 de enero de 1977.

Cuando muere Franco, Carlos Bribián es corresponsal del diario 'Pueblo' en Bonn. Una vida longeva, casi centenaria. Nace en Binéfar, Huesca, en 1926, y muere en Cabezón de la Sal, Cantabria, en 2022. En su juventud, fue portero de fútbol en varios equipos de Segunda División: Logroñés, Numancia, Burgos, Cartagena. Se hizo entrenador, siendo en el Boetticher el más joven de España. Se pasó a ejercer el periodismo deportivo. Entre 1960 y 1988 será corresponsal del diario 'Marca' en la Alemania todavía occidental. La caída del muro de Berlín y la reunificación de las dos Alemanias la vive en el diario 'As'. Entre 1974 y 1984 fue corresponsal en Bonn del diario Pueblo, a cuyos lectores, con importante presencia de emigrantes españoles en ese país, informó de la muerte de Franco. Escribió cuatro novelas y cubrió los Juegos Olímpicos de Múnich y el Mundial de Alemania.

https://www.diariodesevilla.es/espana/arturo-perez-reverte-tercera-guerra_0_2005149085.html

01 noviembre 2025

Athos, Portos, Aramis, D'Artagnan y Alatriste

La Patria (Colombia) - 01/11/2025

A casi 30 años de la aparición de 'Las aventuras del capitán Alatriste' (1996) y a 14 de cuando se publicó 'El puente de los Asesinos' (2011) se termina por fin la sequía y volvemos a saber algo nuevo del soldado español de desordenado mostacho: Diego Alatriste y Tenorio.

Arturo Pérez-Reverte sacó de su olvido al personaje con el que rinde tributo a las obras de aventuras con las que aprendió a gozar de la literatura, y más en esta donde entre los personajes que aparecen en las páginas están nada menos que los cuatro mosqueteros famosos por la pluma de Alejandro Dumas.

En esta oportunidad, Francisco de Quevedo convoca a Alatriste y a su grupo de amigos para una misión en París, de la que nos van soltando a cuentagotas las razones, mientras se presentan en el camino inconvenientes, promesas, preguntas y alguno que otro llamado a los libros anteriores de la saga. Ya sabemos de la devoción del autor por Dumas, y es así como este libro es un tributo también a 'Los tres mosqueteros', pues Alatriste y su grupo de fieles soldados de la corona española se van a cruzar con los cuatro personajes que se quedaron para la historia de la pluma del francés: Athos, Portos, Aramis y D'Artagnan. No solo cruzan palabras, sino que cruzarán espadas y hasta negociaciones y lances, pues iremos descubriendo que el temido cardenal Richelieu va a tener un papel determinante en la desenvoltura de los acontecimientos.

El momento es vital, es justo cuando las tropas francesas fieles al rey tienen en sitio La Rochela, ese lugar de Hugonotes, que no son otra cosa que los calvinistas franceses, siempre con deseos de derrocar a algún Luis, y en medio de semejante historia, por supuesto, que aparecen los intereses ingleses entrometidos en el camino, con Buckingham incluido.


Diego Alatriste y el buen joven y narrador Íñigo Balboa van recorriendo las calles de París mientras se topan con algún asesino por aquí o incluso con un viejo amor por allá, de esos pecaminosos y peligrosos a la vez. De nuevo, Pérez-Reverte saca todo su repertorio de trucos en este libro para mantenernos atentos hasta el final, siguiendo ese tan conocido método del folletín, que nació en las páginas de los periódicos y que tentando la suerte del futuro de los personajes, obligaba a los lectores a quedar en vilo y a comprar el siguiente ejemplar para saber qué pasó. Ahora se hace lo mismo pero por capítulos, poniendo por aquí una escena con algunos puntos sin resolver, mientras el lector atento continuará consumiendo páginas para lograr apreciar en toda su dimensión cuáles son las nuevas aventuras que tienen los personajes de 'Misión en París'.

La saga del capitán Alatriste, a quien de nuevo alguien le cuestiona su título, siempre la recomiendo para quienes consideran cómo abrir una ventana al gusto literario a personas jóvenes, pero no se llamen a engaños. También nos gusta a los mayorcitos que nos criamos leyendo al mismo Dumas, a Salgari, a Verne, a Defoe, a Stevenson. Además, aunque es recomendable leerse cada uno de los libros de la saga en orden, no va a ser obligatorio. Cada título se defiende solo, incluso en ocasiones puede parecernos reiterativo a quienes ya hemos dado cuenta de los ocho libros, pero es entendible que así sea, precisamente para que cualquiera pueda disfrutar de una obra sin haber leído las anteriores.

Mejor lean la nueva aventura del capitán Alatriste y hablemos de libros y de cómo les parece. Fíjense en si les convenció el cameo de los mosqueteros o si pudo ser mejor. Que sea una excusa para recordar a los clásicos, así sea en el homenaje que les rinde ese incansable creador de personajes inolvidables que es Arturo Pérez-Reverte, el mismo de 'El club Dumas' (1993).

30 octubre 2025

Alatriste o la desmesura de su propia osadía

Francisco Martínez Hoyos - lavozdelsur.es - 30/10/2025

Los méritos de la persona no tienen que coincidir con los del escritor. Pérez-Reverte es con frecuencia polémico, arrogante, bocazas. Por eso mucha gente le odia y no se molesta en leer sus libros. Todo lo que tiene que ver con él adquiere, enseguida, una fuerte connotación ideológica. Para la izquierda, es artículo de fe que el novelista cartagenero no es más que un apologista del Imperio español. Los suyos serían, por tanto, valores rancios y militaristas. Pero… ¿cómo explicar entonces su sonada polémica con María Elvira Roca Barea, a la que acusó de olvidar los aspectos más oscuros de nuestra historia?

Precisamente por su sentido crítico, la derecha le acusa de ser un negrolengendario más. Unos y otros no pueden tener, como es obvio, razón a la vez. Lo más seguro es que no la tengan ni romanos ni cartagineses. Pérez-Reverte no se apunta a la leyenda negra: lo que hace es presentar luces y sombras sin el menor complejo. ¿Imperialista? El hecho incontrovertible es que, como encarnación del imperio, elige a un turbio espadachín, un tipo no demasiado recomendable. No parece el personaje más apropiado para un panegírico del Siglo de Oro.

Cuando creíamos que Alatriste no volvería nunca, nos encontramos con la grata sorpresa de 'Misión en París', tal vez la mejor de la saga. El título, anunciado hace ya muchos años, hizo pensar a muchos lectores que el protagonista podría encontrarse con D’Artagnan, Porthos, Athos y Aramis, puesto que sus aventuras tienen lugar en la misma época. Pérez-Reverte ha hecho realidad nuestros sueños en lo que es un hermoso homenaje a su admirado Dumas. Su admiración por los mosqueteros, como es sabido, viene de lejos. Los evocó, por ejemplo, en 'Cuatro héroes cansados', un artículo memorable que te impulsaba a dejarlo todo para ir a la biblioteca a leer sus legendarias aventuras.

Como siempre, los historiadores profesionales se han puesto puntillosos y le han acusado de ser infiel a la verdad de los hechos. Olvidan que la literatura posee sus propias reglas: no importa que el autor sea veraz, sino verosímil, es decir, capaz de convencernos para que pongamos en suspenso nuestra capacidad crítica. Pérez-Reverte, pese a sus excelentes conocimientos de la época, no parte de ningún planteamiento historiográfico. Lo que ofrece es una meditación sobre España heredera de Larra y la Generación del 98: dibuja un país desgraciado, traicionado por unas élites que solo piensan en su propia conveniencia.

Puesto que se trata de hacer literatura y no historia, por supuesto que hay inexactitudes y anacronismos. Francisco de Quevedo no era ese individuo crítico con la Inquisición, sino un tradicionalista de tomo y lomo, lleno de ideas autoritarias y excluyentes. Seguramente, si viviera en la actualidad, sería de Vox o de algo aún peor, lo que no quita para que debamos disfrutar de sus versos incomparables. Pero nada de esto, en la ficción, posee la menor importancia. Lo que cuenta es que Pérez-Reverte hace servir al poeta como una conciencia lúcida de la decadencia imperial.

Alatriste, una vez más, aparece como un individuo profundamente estoico, cualidad que se relaciona con la imagen tradicional de los españoles. Aunque su trabajo consiste en cumplir órdenes, puede llegar a ser insolente con los que están mucho más arriba en la escala social. En cualquier caso, siempre está dispuesto a defender con la espada las palabras de sus labios. Nos recuerda, por su carácter orgulloso, a personajes inolvidables como el Pedro Crespo de 'El alcalde de Zalamea', que tampoco se rebajaba ante los poderosos.

En 'Misión en París' tendrá que cumplir con un plan sorprendente, descabellado, tan imposible que las aventuras del Ethan Hunt de Tom Cruise nos parecen, en comparación, coser y cantar. La aventura está condenada al fracaso, pero no importa. Lo que cuenta es que nuestro héroe ha sabido batirse con coraje y ha sido, como siempre, fiel a sí mismo.

https://www.lavozdelsur.es/opinion/alatriste-desmesura-su-propia-osadia_345005_102_amp.html

27 octubre 2025

"A mi edad tengo muy pocas certezas y muchas incertidumbres"


YouTube - 27/10/2025

¿Qué queda cuando se pierden las grandes palabras como patria, honor o fe? En esta conversación, Arturo Pérez-Reverte propone reconstruir una ética personal basada en la dignidad y la lealtad. Desde su experiencia como reportero de guerra y autor de 'El capitán Alatriste', reflexiona sobre cómo los jóvenes pueden aprender a distinguir el bien del mal en un mundo lleno de grises, donde la cultura se convierte en la mejor herramienta para no ser engañado. Una mirada honesta, crítica y profundamente humana sobre la necesidad de mantener la cabeza fría y el corazón decente en tiempos de confusión. #Aprendemosjuntos

Vídeo completo: https://www.youtube.com/watch?v=LCY2PIBdchU

Una entrevista sobre Alatriste que no hice a Pérez-Reverte

Javier Calles-Hourclé - tribunavalladolid.com - 27/10/2025

Si usted es de los que se les atraganta el cartaginés, y el titular lo atrajo con la expectativa de una jugosa escabechina, le pido disculpas. Soy revertiano. Es decir, en general me atrapan las historias que cuenta, disfruto con la forma en que las narra y, además, me cae bien el hombre. Pero no se vaya, le aseguro que no he ocupado las líneas del folio versando sobre autor de 'Misión en París'. Y no es que no merezca reconocimiento; al fin y al cabo, pasarle el plumero al Siglo de Oro español y ponerlo en la planta de moda joven tiene mucho mérito y no está al alcance de cualquiera —o puede que sí lo estuviese—. Sin embargo, fue Pérez-Reverte quien clavó la pica.

En cualquier caso, ya se han vertido cataratas de tinta sobre el asunto con mayor destreza que la mía, y lo que ocupa a estos píxeles es algo más cotidiano. Me refiero a la noble infantería del campo de batalla literario, nutrida de figuras como temerarios profesores de escuela que se baten contra hordas de dispositivos electrónicos, tratando de captar la atención de sus alumnos con un bloque de celulosa por única arma. Hombres y mujeres discretos, valientes, currantes, pacientes.

Alatriste vuelve a mi biblioteca, y con él, aventuras por la vieja Europa, horas de felicidad, y puede que hasta vuelva el adolescente que alguna vez fui. Observo al recién llegado, que reposa en mi escritorio, tocado con reluciente faja roja de soldado español. Unos centímetros más lejos, receloso, lo relojea el veterano de mil batallas y hojas amarillentas. Recuerdo haber empezado a leer aquel viejo libro sin entusiasmo, como a quien le mandan leer el Boletín Oficial del Estado o la guía telefónica, y recuerdo que algunas páginas más tarde ya no pude abandonar las calles del Madrid del siglo XVII, por las que la profesora de Lengua y Literatura, Cristina Charles, nos invitó a caminar.

Aunque lo intento, no logro recordar cómo fueron aquellas clases con Alatriste en el aula; y se me antoja una buena excusa para llamar a mi profe de Lengua y averiguarlo.

—Hola, Cristina. ¿Cómo estás?

—Bien, transitando el último tramo de la vida y extrañando la profesión.

—¿Cuántos años de docencia?

—En el Don Bosco creo que no llegué a treinta, veintiocho o veintinueve años. También trabajé en el Juan José Paso y un par de añitos dando Comunicación en el San Vicente de Paul.

—¿Y de jubilada?

—Diez años.

—¿Cómo se llevan?

—Me costó, porque era muy lindo trabajar con jóvenes. Dan mucha alegría y te reís mucho; tienen mucha vida. Pero también ya estaba un poco lejos de lo que piensan, de lo que sienten y de cómo ven las cosas. Eso me entristecía un poco, porque pienso que se están empobreciendo —por lo menos en la Argentina—, aunque supongo que es un fenómeno mundial, porque he leído que pasa algo similar en Francia.

—¿En qué ocupaste el tiempo?

—Me dediqué a mis hijos y a mis nietos, tratando de que lean. No lo estoy logrando mucho: tengo dos que son muy lectores, pero los otros no.

—¿Es difícil hacer leer a un joven?

—A veces sí. Me costaba encontrar textos que les gustaran, pero, por ejemplo, tuve éxito con Shakespeare, una cosa rara.

—Y eso que tal vez sea una lectura más dificultosa, ¿no?

—Sí, porque es más filosófico. Pero yo siempre me negué a darles a leer las obras escritas para jóvenes, porque siempre me parecieron una subestimación. Creo que los chicos están capacitados para entender más cosas, sólo hay que ayudarles a encontrarlas.

—¿Te acordás cómo llegaste a 'El capitán Alatriste'?

—Tiene que ver conmigo. Este libro y toda la serie está ubicada en el Siglo de Oro español, que fue la época literaria que más disfruté cuando estuve en la universidad; incluso trabajé como auxiliar en una cátedra de Literatura Española cuando me recibí. Y me pareció que justamente este libro sería muy interesante para quien le gustase la historia, porque hace una recreación muy fiel de los pensamientos, los sentimientos y la lengua de la época.

—¿Qué edad teníamos cuando nos diste ese libro?

—Diecisiete, más o menos. Yo siempre trabajé en los dos últimos años del secundario.

—Recuerdo que me gustó mucho; tanto, que lo tengo con la firma de Pérez-Reverte y Juan Echanove —la rencarnación cinematográfica de Quevedo— y estoy tratando de conseguir la de Viggo Mortensen. Pero ¿esto fue general? ¿Nos gustó a todos?

—A todos, no. Algunos protestaron y otros se engancharon, porque el libro tiene intriga, aventura y muchos elementos que pueden gustarle a un chico joven. Pero no es fácil. Intenté ayudarles a ubicarse en la época, porque me parecía importante para poder entender por qué los personajes actúan como actúan. Y siempre traté de que se identificaran con algún personaje, porque en esa edad siempre hay alguien que te inspira, que admirás o en quien proyectás lo que te gustaría ser, como le sucede a Íñigo. Por lo menos en esa época esto les sucedía a los jóvenes. No sé bien como será ahora, que los veo más orientados a la música, a ser cantantes.

—O "influencers".

—También. Eso de tener un modelo me parecía que podía inspirarles. Siempre traté de ligarlo a la psicología del adolescente. Ese personaje del Siglo de Oro no se parece en nada a uno de nuestro siglo, pero podés buscarlo a nivel de los sentimientos que te asaltan a esa edad: lo que sentís que te falta, lo que sentís que podés llegar a conquistar, las lealtades… Una cosa que tenemos —que es la amistad— está muy valorada en el libro, y creo que es algo bien argentino. La amistad y la lealtad hacia los amigos eran elementos que les llegaban, en esa época en que el colegio era de varones. No recuerdo si, más tarde, les llegaba igual a las chicas.

—Tratar de explotar el sentimiento de camaradería.

—Claro, porque los sentimientos de la amistad, que están presentes en el libro, podían ser una réplica de lo que los chicos sentían; sobre todo en el secundario, donde no podés traicionar la amistad. También maneja muy bien los círculos de poder y la sensación de desprotección frente a eso, otro sentimiento que tienen los jóvenes frente a los adultos, que les imponen sus reglas.

—Creo que me llamó la atención que el personaje pudiera ser un poco rufián, pero también un héroe, porque estaba acostumbrado a héroes impolutos y encontrarme con un personaje ambiguo fue una especie de desafío filosófico.

—Un personaje más alcanzable como persona y más posible como espejo, porque uno tiene sus renuncios, y el personaje perfecto es demasiado: te queda lejos y no lo alcanzás nunca. Este hombre [Pérez-Reverte], que ha sido cronista de guerra, tiene bastante claras algunas cosas que, aunque provengan de otras guerras, las rescata para sus personajes. Mi marido, que es de la época de 'Los tres mosqueteros' y de todas las novelas de espadachines, lo amaba. Se compró todo lo que había de él después de que aparecí en casa con el primer libro, 'El capitán Alatriste', y siguió leyendo otras de sus novelas. Tiene muchas muy buenas.

—A mí me gusta especialmente 'Un día de cólera', en la que narra la revuelta madrileña del 2 de mayo como un reportero a pie de calle.

—Ahí lo tenés a García Márquez, que decía que lo que da credibilidad es el detalle periodístico. Si uno describe que, en tal esquina, a tal hora, tal día, un señor así… el lector te compra la información, porque el detalle hace que parezca real. Te mete en la historia a partir de eso, que es algo que enseña el periodismo. Creo que es un buen consejo literario.

—¿Qué actividades hacíamos con el libro?

—Yo marcaba una cantidad de texto a ser leído, porque a una novela hay que partirla para tratarla con los chicos, y lo discutíamos en clase. Les hacía preguntas, pero también hacía mucho énfasis en la mirada que había tenido cada uno sobre lo leído. Es muy importante que, a medida que se lee, el alumno vaya sacando conclusiones personales y premiaba mucho la visión diferente. Siempre aconsejaba usar lápiz para escribir el libro anotando las ideas que fueran apareciendo y subrayando los párrafos que les llamaran la atención. Eso les servía para las evaluaciones, porque yo hacía dos cosas: control de lectura con diez preguntas sencillas a responder verdadero o falso en un minuto —esa era la parte policial del asunto— (ríe), y, una vez que estaba el control de lectura, que era la violencia para lograr que leyeran, empezaba a formular preguntas que implicaban establecer relaciones dentro de la obra y sacar conclusiones. Siempre pensé que la literatura te enseña muchas cosas, pero, sobre todo, a pensar y fundamentar las ideas. Y si un alumno dice «el personaje es aburrido», que tenga dos o tres ideas que lo fundamenten, que se encuentren en el libro y pueda hacer las citas que lo avalen. Solíamos hacer una ronda después de haber leído todo el libro, donde cada uno hacía un análisis propio y trataba de fundamentar o rebatir la idea de otro compañero, pero siempre con el libro en la mano como fuente y fundamento. Después podían buscar cosas adicionales. A veces hacíamos un ensayito escrito, como una forma de darme cuenta si al alumno había procesado y podía hacer un análisis del texto —cosa que ahora no les daría, porque harían un refrito con inteligencia artificial. Esto está pasando en la universidad y es terrible.

—¿Usabas el libro para hacernos saber que existieron unos tales Quevedo, Góngora, Lope y Cervantes?

—Sí, yo les abría el texto presentándolos y contando algunas anécdotas entre ellos —que hay muchas—, para humanizar a los personajes. Sobre todo a Lope, que era muy enamoradizo y tenía sus conquistas en ese ir y venir entre las mujeres y la iglesia, porque era un poco cura y un poco amante. También les hacía una ubicación en la época, pero no de entrada. Lo iba sacando en base a lo que aparecía en el libro: por qué determinadas visiones del mundo eran de una forma u otra. Recuerdo una anécdota de un condenado a muerte que caminaba hacia el cadalso erguido, envuelto en su capa, con actitud señorial, o de otro que entraba a Madrid a caballo y, al caérsele una joya valiosísima, siguió cabalgando sin siquiera darse vuelta para ver quién la había tomado, por ejemplo. Ese tipo de cosas que son propias de una época y pueden llamar la atención.

—Pérez-Reverte dice que un buen profesor con un libro en la mano, como por ejemplo el 'Quijote', tiene una herramienta para tratar infinidad de temas.

—Claro, Alatriste sirve para hablar de un montón de temas también. Obviamente, tiene menos personajes que el 'Quijote', que es más complejo, pero el 'Quijote' es de Cervantes y Cervantes no hay tantos. Diría lo mismo de 'Cien años de soledad', que es otro libro que he dado en la secundaria, y que es tan complejo que uno podría estar todo el año tratando distintos temas, como el rol de la mujer, la mística de los fundadores, etc. García Márquez decía que le gustaba la Biblia porque era un libro que tenía muchísimas historias, y entre tantas tenía que haber alguna interesante.

—Vas a tener que regalarle a tu marido el último Alatriste, que acaba de salir.

—Sí, no sabía que había salido un texto nuevo, pensaba que era una reedición. Del que más me acuerdo es del primero, porque era el que les di a ustedes, luego les dejé abierta la posibilidad de seguir leyendo los otros, pero no sé cuántos lo habrán hecho.

—Conmigo te funcionó.

—Sí, es algo lindo.

—Si Arturo Pérez-Reverte leyera este artículo, ¿qué te gustaría decirle?

—Que me encantaría tener un autor argentino que rescatara así una época tan valiosa de nuestra historia, con esa manera tan amplia y tan abierta. Pienso que me sentiría muy identificada y, como docente, me encantaría darlo en la escuela. Y la otra, bueno, felicitarlo porque es un muy buen narrador, pero eso él ya lo sabe.

—Muchas gracias por habernos presentado a Alatriste.

—Te agradezco. Me alegra que te acuerdes de él y de habérselos dado.

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